Hada madrina

El fuego se desnuda ante mí,
el sol se acerca,
la vecindad se extingue…

El fuego me toca,
Llega mi hada madrina; la preciosa de mis sueños, con su vestidito azul de perlas preciosas y sus rizados cabellos blancos pavonearse con el viento.
El fuego se acerca y ella puramente arde en llamas…

Muerte

Huelo a ceniza,
rosas de cementerio me persiguen,
huelo a dolor, a miedo,
simplemente huelo a muerte…

Maldito amor

Casi son las seis y hace tan solo unos segundos entendí que llorar calma la ansiedad, parece que ni el tiempo logra borrarte de mi cabeza. Nada pasa, o sí, cada segundo estoy mas lejos de lo que en algún momento creí era un sueño. Cada día me condeno más por no decirte lo que siento, cada día me culpo más por no pedirte que vuelvas, rogarte que me beses. Insolentemente me levanto de mi lecho pensando que volverás.. Todo se ha vuelto un maldito ciclo de dolor, un panóptico sin salida. Eso, una maldita cárcel.

Quisiera mentirme en este momento., sé que no hay nada más sano para la mente que olvidar que estas viva, en esta ciudad, por estas calles. Tal vez mi gran error ha sido sentir, parece que tu ya no sientes, que estas feliz así, sospecho también que con tu felicidad me hago mas infeliz. Como quisiera que estuviese esta atada a la mía? Cuantos cosas no se quieren y cuantas no se obtienen? Me da asco la vida cuando me pone tantas trampas. Me da fastidio mi cama cuando no tengo a quien consentir en ella. Pero es que hoy no quiero a cualquiera, inentendiblemente solo te quiero a ti.

Sé que decirtelo no cambiará la situación, siento que confesarte mi maldito dolor no cesará mi angustia y necesidad de ti, tengo claro que quieras estar así, sin mí. Cuan infeliz me hace observar tu vida y sentirla tan lejos de la mía.

El amor es una cosa extraña, llega cuando no lo pides y se va cuando realmente no lo esperabas. Nace cuando todo es im-pensado y se va cuando todo está bien planeado. Sospecho que el amor tiene vida y hace con ella lo que le place. Maldito amor que nada bueno traes cuando te vas.

WEED

"Hoy decidí que en cada rincón de su cuerpo dejaré un vacío del mio."

Todo parece olvidarse, incluso aveces mi desvencijada memoria me recuerda los ciclos del vicio, las inolvidables horas de marihuana y el olor a hierba que se expande sobre mi cuerpo, cuando ella entra en mí; se encienden las veces que ya la he fumado, las horas que ya he estado con ella, los días que a su lado he llorado.Ella me hace olvidarme del resto, eso me hace feliz.

Todo termina, y así inexplicablemente he iniciado mi ciclo rosa, el de pensar bajo una sdroga culaquiera y luego anularla con el profundo sueño que ella me hace sentir.


Las inagotables horas de introspección, el insufrible tormento de ver que se van de mi vida, que mi vida es eso, que se ha ido, y que sin pensarlo más hay otras horas que me esperan; sin darme explicaciones, la fumo, sin descanso, sin preguntarme si está bien o mal, al fin y al cabo todas son convenciones sociales. Yo por lo menos me pregunto si la vida es eso que los demas hacen mientras corren a sus empleos, me pregunto si la vida es sufrir tanto por un papel que se multiplica en los bancos. No se trata siempre de cuestionamientos, se trata de pensarse en el mundo que los demas han creado, de hacerse individuo en estas multiples individualidades que parecen reproducirse clonadas.

Todos gozan de una maldad inentendible para mí; las horas estremecen mis silencios, todos los que aún hoy han de desaparecer despues de este encuentro tan planeado por mi cerebro. Ya nadie goza de pasión desenfrenada, todos andan por ahí sin ambiciones menos banales que las que aparecen en sus mentes.

La misma noche que decidí escribirte, noté que el resto te culpaba, la misma noche que noté que eras para mí lo que para los demas es maldad, la cuna de la calma y la introspección. y me pregunto en que momento te volviste tan mala, tan intocable, tan innombrable, en que momento te hiciste tan impura si de la tierra saliste. No entiendo estos humanos, no los culpo, no los someto como ellos hacen contigo.. yo solo te disfruto, te escribo, te huelo, te fumo....

A mi madre....

Pocas veces he escrito evocando tu imagen, algunas mañanas quise olvidar que ya no estabas. Limitadas veces he pensado que no vendrás. Hoy he decidido pensarte, escribirte, amarte, tocarte… todo desde ese lejano presente que nos separó esa fría noche de agosto.
Ocurrió cuando la niñez recorría todo mi cuerpo, desde entonces supe que te habías ido, honestamente necesitaba tanto de ti que empecé a hablarte sin temor a enloquecer. Algunos sueños traían tu hermosa figura recorriendo el pasillo de mi vida. Eres como el mito que se cierne sobre mí. El todo que no existe, el Dios al que le rezo, el sueño que aparece cuando mi memoria está cansada. La mirada que deseo ver, los ojos que quiero tocar. Los labios y la voz que anheló escuchar, el regaño que quiero sentir. La persona a la que quiero odiar y amar al mismo tiempo. El único sujeto al que quiero exigirle cariño, la única mujer que deseo que me abrace...Cuando me veo en el espejo siento que algo de ti se quedó en mi rostro, cuando con amigos tuyos me encuentro su amor hacía ti me hace sentirme feliz porque lograste dejar un hermoso recuerdo en cada uno de ellos, quienes te odiaban, creo yo simplemente te envidiaban… mi muy hermosa musa… siempre estarás como mi mayor ángel cuidándome desde lo que algunos titulan, cielo….
Cada mañana veo en mi rostro mas señales de ti, de tu sonrisa perfecta, de tu mirada juvenil, de tus ojitos soñadores, de tu hermoso pelo. Cada mañana, veo mis manos parecerse mas a las tuyas...

fuiste la mezcla ideal entre la femeneidad y la locura, la vulgaridad y la elegancia, fuiste la mejor amiga, la mujer mas grosera, la más compulsivapara comprar, la menos amorosa, pero sin dudarlo, la que más sabía amar...

No sé que pensar, tal vez que te tenías que ir como todo han de hacerlo, aún hoy me niego a creer que eso haya sucedido. A veces pienso que fue una pesadilla que pasó y ahora no está, que te fuiste de viaje, pero que volverás; mientras tanto me he quedado amando sin descanso a quienes me rodean, intentando tener algo de mi amor para cuando mis llorosos ojitos te vuelvan a ver. Hoy madre,quisiera decirte simplemente cuanto te amo Felisa…

Sé que en tu cabeza un instante antes de morir, pensaste en tus hijas y supiste que podías descansar...